En estas elecciones 2021 la madre de las batallas para Kicillof y la oposición de Juntos es control de la Legislatura bonaerense. Qué temperatura se vive en los despachos y cuál es el escenario que leen los legisladores provinciales.
Sea cual sea el resultado en estas elecciones 2021, a partir de diciembre la Legislatura bonaerense exhibirá un nuevo equilibrio de poder: si los resultados de las PASO 2021 se repiten, Juntos podría mantener o ampliar la mayoría en el Senado y alcanzaría la paridad en Diputados, mientras que si el Frente de Todos logra una remontada podría acortar e incluso anular la diferencia en la Cámara alta y mantener el control de la Cámara baja.
Si bien los números de las elecciones 2021 desembocarán inexorablemente en una nueva correlación de fuerzas en la Legislatura bonaerense, los efectos prácticos podrían ser bien diferentes. Dependerá de para dónde se incline la balanza, si el 15 de noviembre emerge una oposición fortalecida o, si por el contrario, irrumpe un oficialismo con mayor poder de fuego en el parlamento.
Es un dato central si se consideran las negociaciones que afrontará Axel Kicillof en la Legislatura bonaerense: es inminente el debate por el Presupuesto 2022, la Ley Impositiva y el endeudamiento; y también queda en el tintero la demorada discusión por las sillas opositoras en organismos de control como el Banco Provincia, la Tesorería y Contaduría provincial, el Consejo General de Educación y el OCEBA, entre otros.
Si la tropa del Frente de Todos logra revertir la derrota electoral, que en la provincia de Buenos Aires se extendió a siete de las ocho secciones electorales, Kicillof ganará más musculatura para las próximas pulseadas, pero sí, en cambio, se espejan los resultados de las PASO, Juntos podría facturar más caro los acuerdos e imponer la agenda de la Legislatura bonaerense los próximos dos años.
Las lecturas en la alianza opositora sobre la Legislatura bonaerense que se viene tras el 15 de noviembre tienen algunos matices. Hay legisladores de Juntos que opinan que el Gobierno se encamina hacia una rotunda “radicalización” y otros que apuestan a que Kicillof se verá forzado a convocar a un diálogo, que le permita generar consensos y edificar gobernabilidad. Sin embargo, todos condicionan el escenario a la reacción del Frente de Todos tras los resultados de las elecciones 2021.
La Legislatura bonaerense que se viene: el análisis en el Senado
“Aún con un resultado ajustado, aunque en la provincia el Frente de Todos sume dos senadores como esperan, el Gobierno no tiene otro camino que consensuar un diálogo más maduro en la Legislatura bonaerense, independientemente de los números esa una situación se va a dar. Este plan primavera electoral va a ser difícil de sostener”, sostuvo un senador de Juntos a Diputados Bonaerenses.
En la Cámara alta también remarcan la intención de negociar las sillas en los organismos de control después de las elecciones. “Los cargos que se tienen que negociar en la Legislatura bonaerense se van a plantear ahora con el Presupuesto que va a ser difícil que se trate antes del recambio porque estamos a 20 días de que eso pase”, sostuvo otro senador y chicaneó: “Kicillof no va se va abrir al diálogo porque el que gobierna es (el jefe de Gabinete, Martín) Insaurralde”.
Otro legislador con oficina en el Senado puso el foco en la reacción del Frente de Todos ante los resultados de las elecciones 2021. “A partir del lunes va a ser intenso, hay que ver qué hace el Gobierno, en las PASO se autoflageló. En la provincia vamos a estar atentos porque en Nación mandaron un Presupuesto que el propio presidente de bloque lo boicoteó, esperaremos ver qué posición toman en la Legislatura bonaerense”, amplió otro senador.
Diputados Bonaerenses